Tonalá,
Jalisco. Octubre 2014
Durante
siete años he sido una persona inmensamente feliz, he viajado y experimentado
sensaciones, emociones y sentimientos durante cada día en cada año. Desde la
primera vez que cruzamos nuestras miradas visualice en la distancia un amor maravilloso a tu lado.
Crecimos
incomparablemente, rompimos las apuestas de un montón de gente que creía que no
duraríamos más de 90 días, hicimos promesas y rompimos la mitad de ellas.
Durante
muchos años maduramos de la mano, jugamos siendo nosotros mismos y compartimos
momentos complicados y hermosos juntos.
Has
sido y siempre serás lo mejor que pudo pasar, conocerte lleno mi vida de
ilusiones, de objetivos, de pensamientos sin sentido llenos de amor, viaje por
mil mares de tu mano y obtuve más de una mirada cálida transportada por la luna
cuando estábamos distantes y lejos.
Cuanto
podría agradecerte por todo lo bello que hiciste por mi, por tantas películas,
tantos helados y tantos kilos de palomitas; cuantos kilos perdimos y subimos
juntos y sin duda, fuiste mi mejor aventura.
He
de ser sincera contigo, porque eres el amor de mi vida y lo que menos mereces
es que esta historia esté manchada de mentiras, errores y discusiones.
Muchos
días discutimos por tonterías, nos perdimos de películas juntos, de paseos en
motocicleta y de miradas llenas de amor, perdimos la brújula de nuestro destino
y poco a poco caminamos en dirección contraria, de la mano pero lejos.
Por
días e incluso meses me he sentado a reflexionar sobre nuestra situación y
sobre los objetivos que tenemos en común. Familia, trabajo, estudios, viajes,
etc. Fueron tantos los motivos que lentamente nos separaron que me parecen
imposibles e irreales.
Debo
agradecerte por todas las vidas que me regalaste, por los libros que
compartimos y que aunque tu no leíste yo lo hice por los dos, por aquellas películas de terror en las que tome tu mano y
me abrazaste con protección, por las pocas comidas que preparamos juntos y por
tantas locuras que hicimos desde el día primero que te conocí.
Ambos
cruzamos senderos enormes y difíciles para estar juntos, fueron muchas personas
en contra de este amor y para nuestra
fortuna, lo afrontamos, y continuamos.
Esperábamos
con ansias el día para vernos y comenzar a besarnos, a mirarnos, a querernos,
el juego eterno antes del te amo…
Oye
amor te… ¿Recuerdas?
Quiero
que sepas con sinceridad y honestidad que fuiste lo mejor de mi vida y estoy
segura que serás siempre lo mejor que pude tener, conocer, amar y querer.
Porque el amor que existió entre nosotros es inmenso, inigualable, inalienable
e imperecedero.
Pero
necesito que sepas como me he sentido en los últimos meses; probablemente tú no
te sientas como yo, o quizás sí pero aun no nos damos la oportunidad de
hablarlo.
Quiero
que sepas tres cosas y que no las olvides nunca.
1.
Fuiste, eres y
serás el amor de mi vida
2.
Nunca fuiste
un segundo plano en mi vida
3.
Aunque una
familia no esté en mis planes tú y solo tú fuiste mi familia por muchos años.
No
fueron las visitas al psicólogo, ni lo mucho o poco que logre en la
universidad, tampoco tuviste que ver tú y mucho menos te culpo por absolutamente
nada.
Pero,
quiero pedirte una enorme disculpa y espero
que algún día puedas perdonar el poco control que tuve por no cumplir
las promesas que te hice alguna vez.
Por
cambiar mis metas y mis objetivos y sobre todo por permitir que nuestra
relación todos los días se fuera helando.
Ambos
nos equivocamos durante mucho tiempo y cuando tratamos de solucionar las cosas,
nos cegamos ante todo y preferimos continuar sin buscar respuestas, lo que nos llevó
a amarnos como de costumbre.
Nuestro
mayor error fue, olvidar pasear juntos, tomarnos de la mano por las noches,
hacer el amor aunque sea una vez en siete años, olvidamos nuestras cosas
favoritas, dejamos de salir, de caminar, de hacer cosas nuevas, no viajamos, no
disfrutamos, no estuvimos solos.
Todo
eso, nos destruyó lentamente y de la peor forma. Sabes nos equivocamos mucho, y
aunque ahora mismo los dos estemos haciendo un gran esfuerzo por sacar esos
errores, por mirarnos sin sentir dolor, por compartir recuerdos y llevar la
piel de ambos en nuestro día a día, las cosas ya no son como antes.
Nos
amamos! Tú me amas y yo te amo a ti, pero las cosas son complicadas ahora,
ninguno de los dos está solucionando nada y ninguno mereces estar así.
Por
el amor que te tengo, por el amor que siento por ti, me voy.
Porque
aunque la vida nos separe ahora, brindo por un momento en el que nuestros
caminos volverán a cruzarse.
Deseo
la felicidad máxima en todas las áreas de tu vida, éxito en cada una de tus decisiones
y valor para enfrentar cada cosa que hagas y suceda.
Confió
plenamente en tus capacidades, habilidades, experiencia, inteligencia, pasión y
sé que tu bondadoso corazón y tú nobleza serán un viaje en tu vida, donde
estoy segura te espera un gran futuro.
Ojalá,
puedas perdonarme algún día. Y asegúrate de ser feliz.
Estaré
a tu lado en la distancia.
Te
amo para siempre.
¿Cómo puedes escribir tan bonito?
ResponderBorrarHe quedado prendada de tu escrito y sin duda transmites muchos sentimientos.
Un beso
Muchísimas gracias por tu comentario y por tu halago.
BorrarMe da un gustazo que fuera de tu agrado.
Un beso!